Carpintería de aluminio y PVC, diferencias en el material
- A nivel estético, el PVC ofrece diversos colores y puede tener un acabado más grueso, mientras que el aluminio ofrece otras ventajas como la infinidad de acabados más allá del color, además suele ser más utilizado en arquitectura vanguardista debido a la belleza de sus acabados.
- En cuanto a sus cualidades aislantes, el PVC tiene una conductividad térmica muy débil, por lo que es considerado material aislante, además ofrece un sellado perfecto. El aluminio requiere de un proceso de rotura del puente térmico, ya que conduce la temperatura, así que su precio puede encarecerse.
- El PVC no suele generar condensación en el marco, aunque sí lo hace en el cristal, el aluminio puede evitar de una manera muy eficaz la condensación gracias a nuevas técnicas que permiten que no retenga humedad.
- Ambos materiales requieren un mantenimiento nulo, simplemente aplicando agua y jabón podemos mantener limpio tanto el aluminio como el PVC. Ambos materiales son extremadamente longevos, incluso ante las inclemencias del tiempo.
- Un dato fundamental, y de momento controvertido, es la sostenibilidad de ambos materiales. Se suponía que la fabricación del PVC emitía gases nocivos a la atmósfera y que los productos de tratamiento del aluminio eran altamente tóxicos, sin embargo los métodos actuales de fabricación han permitido fomentar nuevos procesos que evitan emitir gases nocivos, y los productos potencialmente peligrosos han sido sustituidos por otros más saludables.
- En cuanto al precio, el PVC es ligeramente más caro, de media un 10 % aproximadamente, sin embargo el precio final depende en gran medida de nuestras necesidades, existen aluminios tratados mucho más caros que el PVC, así como elementos de carpintería de PVC más caros que los perfiles habituales de aluminio. Las características de tu reforma son las que decidirán acerca del precio final.